Como presidente de la Asociación de Ferias Españolas, en primer lugar quisiera enviar mi más sentido pésame a las familias de los fallecidos por el COVID-19, transmitir unas palabras de ánimo a los demás afectados por la pandemia y todo nuestro agradecimiento a los profesionales sanitarios y de otros muchos colectivos que se encuentran en primera línea haciendo un trabajo admirable para que los ciudadanos podamos seguir afrontando esta situación sin precedentes.
Por lo que respecta a nuestro sector en España, como en muchos otros países de Europa y del resto del mundo, la pandemia ha hecho que se paralice casi por completo la actividad ferial desde marzo hasta junio, suponiendo ello que se hayan pospuesto y en algunos casos cancelado solo en nuestro país alrededor de 100 ferias y numerosos congresos y eventos. En toda Europa la cifra se eleva a más de 3.300. Algunos operadores feriales ya están planteando ERTES y buscando fórmulas para recortar gastos y hacer frente a la falta de ingresos.
Las consecuencias de todo ello son muy graves, tanto por la repercusión económica en la industria ferial propiamente dicha, como en otros muchos sectores de actividad relacionados directa o indirectamente con ella, desde las empresas de stands y servicios, transportes, restauración, hoteles, azafatas e intérpretes, agencias de viajes, publicidad, seguros, imprentas, ocio, etc. También para las empresas expositoras y visitantes, la imposibilidad de desarrollar operaciones comerciales y cerrar negocios en las ferias no celebradas supone un coste de oportunidad muy elevado.
Por esta razón, desde las asociaciones internacionales del ámbito ferial se están solicitando ayudas a las instituciones europeas, gestión que también estamos realizando en paralelo desde AFE, para recabar el apoyo correspondiente a la Administración Española.
En el aspecto positivo, el sector ha vuelto a demostrar su capacidad de reacción y de adaptación a las circunstancias, poniendo sus infraestructuras y recursos de todo tipo al servicio de la ciudadanía. Así, varios de los recintos feriales de los miembros de nuestra asociación se han convertido en hospitales o lugares en los que albergar a personas sin hogar. El ejemplo más visible es el del recinto de la Feria de Madrid, que ha tenido que adecuar varios pabellones en un tiempo récord para poder acoger miles de camas para enfermos de coronavirus. Algo similar está ocurriendo en varias ciudades más, y no solo en España, sino también en otros países.
Por último, quisiera lanzar un mensaje de esperanza, en la confianza de que la situación no se alargue mucho más y de que seamos capaces entre todos de terminar con la pandemia cuanto antes. Son tiempos de responsabilidad compartida y de compromiso con nuestro entorno y, por ello, tenemos que seguir trabajando juntos con el convencimiento de que vamos a volver fortalecidos para brindar nuevas oportunidades de revalorizado encuentro.
La Asociación de Ferias Españolas, fundada en 1964, agrupa actualmente a 25 miembros, que representan más del 90% de la actividad del sector, la cual supone más de 4.000 millones de euros de impacto económico conjunto anual. España es uno de los principales países de Europa en materia de ferias, junto con Alemania, Italia, Francia, Turquía y Reino Unido.